Estamos rodeades por todos lados de mensajes de autoaceptación, body positivity, autoestima, amor propio y… muchos etcéteras más, y si bien, este cambio de mindset es buenísimo, a veces también puede generar una gran presión por aceptarnos sin peros (cosa casi humanamente imposible), y esto sin pensar en todos los otros mensajes contradictorios que la sociedad nos manda sobre una serie de temas, incluyendo el tan anhelado “ser fit” (dígase cuerpos estereotipados o el bonito feed de IG).
Así que, si tenemos esa meta en nuestra mente, ¿Qué significa realmente serlo y cómo lograrlo? Aquí te digo nuestras 4 estrategias y formas de verlo.
1: Concientízate sobre qué es realmente ser fit
Primero lo primero, definamos de una forma real el concepto de ser fit, pues nos han vendido en este concepto abdómenes marcados, glúteos de acero y piernas sin un gramo de celulitis, ideas que si bien están padrísimas (si las tienes), para el otro resto del 98% de la humanidad debería de ser:
- Estar saludable, en la verdadera extensión de esta palabra, es decir, con todos tus triglicéridos, azúcar, colesterol, etc., etc. dentro de los rangos aceptables.
- Llevar una buena alimentación, tema del cual profundizaremos más adelante.
- Hacer ejercicio al menos 3 veces por semana.
- Cumplir con tus chequeos médicos de rutina.
¡Ah! Y un detallito extra, tener una buena salud mental, pues sin ella, no hay nada más. Así que, ser fit, más bien debería decirse “ser saludable”.
2: Llevar una buena alimentación
Ahora bien, toquemos este tema un poquito escabroso: la comida y qué significa comer bien, pues esto puede variar mucho entre personas, gustos e, incluso, ideologías; pero fuera de estas cositas, tomemos al menos 3 puntos de lo que significa una buena alimentación:
- Siempre debe ser balanceada, es decir, que incluya todos los grupos alimenticios y en cantidad suficiente.
- Siempre tomar awita.
- Cada persona es un universo propio, la dieta que le sirve a una persona, puede no ser ideal para otra.
Por lo tanto, la sugerencia siempre será tratar de consultar a un(a) especialista, pues será quien pueda asesorarte de la mejor forma. Recuerda que cualquier dieta milagro, incluyendo la de luna o de la sopa de lechuga, tendrán efectos a corto plazo, pero a larga hay que aprender a comer bien y de todo.
3: Hacer actividad física
Ahora bien, sin duda, para ser fit hay que hacer ejercicio y, aunque la intensidad también puede variar a los gustos y las necesidades, te recomendamos:
- Hacerlo al menos 3 o 4 veces a la semana.
- Encontrar una actividad que realmente te guste. Ahora hay mil opciones además del gimnasio: crossfit, baile, box, pilates, zumba, pole dance, aéreo y mil alternativas más; trata de escoger una que realmente disfrutes para que no renuncies y si no, siempre puedes optar por caminar, correr o hacer videos de entrenamiento en casa.
Y, eso sí, todo dependerá de tus metas, pues si quieres tener un cuerpo marcadísimo, es claro que no solo lo obtendrás caminando media hora al día, así que, piensa realmente qué y cómo quieres ser.
4: Aceptarse no es sinónimo de abandono
Finalmente, la última recomendación para ser fit: la autoaceptación es vital y a veces no tiene que ver con el físico (si no checa la historia de muchas super modelos) así que, hay que aprender a amarnos.
Eso sí, y en mi opinión, esto no significa tirarnos a un pozo de vale madrismo, así que descubre tus propias formas de cuidarte, más allá de llevar una alimentación balanceada y tener actividad física, así que:
- Si te gusta, descubre la magia del maquillaje.
- Selecciona ropa que te haga sentir una reina/rey.
- Compra buenos productos para tu piel y si tu economía lo permite date algun lujito extra como un tratamiento o masaje.
- No te impongas modelos de belleza imposibles, recuerda que la redes, revistas y medios están llenos de luces, filtros, cirugías y demás truquitos que están muy padres visualmente, pero que pocas veces reflejan la realidad.
Y, siempre, siempre, explora cuáles son tus verdaderas metas y cómo realmente te quieres ver, tal vez veas descubras otra realidad.
Ser o no ser fit
Pues bueno, esta es nuestra postura sobre ser fit, hay muchos niveles y formas de serlo, pues eso sí, todo empieza desde el amor propio, porque cuidarse es quererse, pero también descubre cómo, cuando y, lo más importante, por qué quieres hacerlo.
Suena a slogan de compañía de seguros, pero ser tú es increíble.