piel de tu bebé

Tips para el cuidado de la piel de tu bebé

La piel de tu bebé es más delicada de lo que te imaginas.

Una de las mil cosas que jamás imaginé cuando me convertí en mamá, es que la piel de tu bebé es tan delicada. Si no fuera por mi hermana, quien me aconsejó con qué jabón lavar la ropa con la que estaba esperando a mi bebé, yo la hubiera remojado en suavizante de telas por tres días. ¡No lo hagas, hermana!

Esto es porque su piel es 30% más delgada que la de un adulto, se seca más rápido y es muy sensible, apenas está creando defensas y tiene poca capacidad de sintetizar melanina. Por eso es muy importante que cuides bien de la piel de tu bebé y aquí te dejo unos tips.

 

piel de tu bebé

 

Lava su ropa con jabón especial para bebés

 ¡Ojo! No todos los que dicen “para bebé” lo son y no todos lo que no lo dicen no lo son, como el caso del jabón Zote blanco, que por su baja alcalinidad es bastante recomendable para lavar la ropa del recién nacido.

Es importante que te fijes que el jabón que compres sea neutro e hipoalergénico. Y claro, lavar su ropa por separado del resto de la ropa de la familia.

 

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Busca productos libres de perfumes. 

 

Desde las toallitas húmedas, el jabón, la crema, la pomada, etc. Hay infinidad de marcas de productos para bebés, sobretodo de toallitas húmedas y la gran mayoría tienen perfumes que no ayudan nada a la piel de tu bebé, la pueden irritar y lastimar. Si no encuentras toallitas sin perfumes, puedes optar por limpiar sus pompis con un algodón humedecido con agua.

Busca un jabón sin detergente para el baño, que tenga un PH cercano a 5.5 al igual que el shampoo y si presenta costra láctea NO LA QUITES,  no la talles, no te malvibres, solita se irá cayendo, tu tranqui y disfruta a tu baby.

Ponle mucha cremita, busca que tengan ingredientes como la alantoína o el pantenol y protectores como la camomila. Sin perfumes y sin parabenos.

 

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Por tu madre santa, no expongas a tu bebé directo al sol

 

Los baños de sol son cosa del pasado y más en este país tropical donde pega el sol sabrosito. Si te dice la abuelita, la suegra o el pediatra que pongas a tu bebé en el sol 5 minutos boca arriba y 5 minutos boca abajo, diles que no es pollo rostizado. No expongas la piel de tu bebé.

Antes se creía que los baños de sol eran buenos para que los bebés agarraran color o que tuvieran vitamina D. Pero se ha descubierto que no es necesario llegar a esos extremos, con la resolana que le da cuando está en una habitación naturalmente iluminada, es suficiente. Por el contrario exponer al sol la piel de tu bebé, puede causarle quemaduras, irritación y salpullido. También es muy dañino para los ojos que son aún más delicados que la piel.

Y ya que estamos hablando del sol, trata de no llevar a tu criatura a la playa o la alberca antes de los 6 meses. Si lo haces, ponle ropa que cubra todo su cuerpo y que tenga Factor de Protección Ultravioleta (UPF). Desde gorros, blusas y pantalones. Recuerda que tu bebé tiene muy poco tiempo en el mundo y le queda mucho para explorar, no hay prisa, quédense en la sombrita.

 

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Usa sí o sí, siempre, un protector solar

Para los bebés más grandes, además es recomendable usar un protector solar que tenga amplio espectro (50 FPS) y aplicarlo unos 15 minutos antes de exponerse al sol, en todo el cuerpo, no solo en las zonas que estarán expuestas. 

El uso de protector solar se recomienda cada vez que van a salir de casa. O sea si vas al parque, a la escuela, al cafecito o con la abuela, le pones protector solar.

Y sobretodo, si notas enrojecimiento, salpullido, granitos o alguna otra anomalía en la piel de tu bebé, no le pongas remedios, habla con tu pediatra o un dermatólogo.