amor tóxico

¿Por qué no puedo dejar el amor tóxico? Aprender a amar bonito.

Aprende qué puede estar detrás de esta adicción.

Ninguna persona que me conoce podía creer que yo estuviera tan enganchada con alguien que me hacía tanto daño, ni yo misma me reconocía dentro de ese amor tóxico.

El amor tóxico, era como una droga, no podía dejarlo y cuando al fin me armaba de valor y terminaba la relación, tenía síndrome de abstinencia, sentía que iba a morir y entonces lo volvía a buscar. Aguanté malos tratos, humillaciones, por supuesto que infidelidades y aunque tenía el corazón completamente destrozado, aunque mi cabeza me decía que estaba mal, que debía dejarlo, yo seguía ahí.

 

Fotos de stock gratuitas de adentro, adulto, alma

¿Por qué aceptaba esa relación?

Me considero una mujer fuerte, feminista, trato de cultivar mi mente y estar a la vanguardia, por eso nadie podíamos explicarnos por qué aceptaba este amor tóxicoMe decían que debía amarme, valorarme, respetarme, tener dignidad, yo misma me lo decía todos los días, pero eran sólo palabras y conceptos que no podía interiorizar.

Finalmente comencé a poner límites en la relación, a responder cuando me trataba mal, a no permitir que me controlara, a preguntar con quién estaba cuando llegaba tarde a casa, por su puesto la relación dejó de funcionar para él, así que se fue.

 

Fotos de stock gratuitas de adentro, adulto, alma

 

Soledad, tristeza, desesperación, debilidad…

Si, esta historia no es de cómo soy una mujer súper fuerte que logró dejar al amor tóxico, él me dejó a mí y por mucho tiempo tuve la esperanza de la reconciliación, aún a veces me descubro pensando en él, extrañándolo, después me acuerdo de por qué me volví adicta a él y se me pasa. 

Fue una noche de soledad, tristeza, desesperación, debilidad, horror, la noche más oscura de mi vida, cuando sentí que yo no valía nada. 

Él y yo ya habíamos terminado y fue unos de esos días en los que todo te sale mal, de verdad sentía que no valía nada, por primera vez en mi vida, hecha bolita en el sillón de mi casa, a oscuras, mientras lloraba, comencé a decirme cosas horribles: me dije tonta, estúpida, no vales nada, eres una basura…. Y más y más y más. 

Después, no conforme con eso, empecé a golpearme, primero la cabeza, después los brazos, las piernas. Cuando me di cuenta de lo que me estaba haciendo, me sentí aún peor, pero lo más raro fue que encontré cierto placer en ese dolor, qué enferma pensarán, pero aquí es donde entendí todo y pude comenzar a ser compasiva conmigo.

 

amor tóxico

En mi subconsciente él me amaba muchísimo

Por esa época, una cuenta que sigo @mamaminimalista publicó algo sobre crianza respetuosa, me interesó el tema e investigué más. Aprendí que una mamá o papá que golpea a su hijo, lejos de darle la lección de portarse bien o por la razón por la que lo haya golpeado, lo que le está enseñando al niño es que la persona que lo ama lo puede lastimar; que el amor se expresa a golpes, gritos y humillaciones, el típico “te pego porque te quiero”.  

Entonces, en esos tres segundos en los que fui consciente de que me estaba causando dolor y que ese dolor me daba cierto placer, me conecté con la forma en la que mi mamá me hacía sentir cuando me golpeaba, me regañaba y cómo me trataba y esa misma sensación me la provocaba el amor tóxico; él nunca me golpeó, pero si me hizo sentir humillada, desvalorada, inútil, etc. 

De todas las parejas que he tenido, él es el único que me trató mal y con el que más me enganché, lo cual ahora me parece bastante lógico, él me demostraba su amor igual que mi mamá, por lo tanto, en mi subconsciente él me amaba muchísimo y esa forma de amar me resultaba completamente familiar y ahí es donde radica el placer del dolor, de alguna forma me estaba sintiendo amada cuando me lastimaba.

 

amor tóxico

 

Perdonarme y comenzar a sanar

Entonces logré entenderme, darme cuenta de por qué tuve esa relación, por qué acepté ese trato, me ayudó a perdonarme y comenzar a sanar, pero lo más importante, a decir: no más.  Cada vez que me descubro pensando en la posibilidad de volver a estar con él, me recuerdo a mí misma que el amor no se expresa con violencia, que merezco un amor bonitoDe esta manera esa ansiedad por estar con él se va y es más fácil para mí mantenerme alejada. Claro que todavía tengo mucho trabajo que hacer conmigo misma, pero ya siento que avanzo, que estoy en el camino correcto porque ahora puedo ver con claridad.

También entendí que yo misma tengo muchas actitudes tóxicas, que vienen de una conducta aprendida y soy tan responsable como él de haber creado una relación de amor tóxico. Para mí ha sido fundamental aprender a identificar mis emociones, tratar de calmarme antes de explotar, no dejarme llevar por la ira, ser amable, cordial, respetuosa, cuidar mis palabras y la forma en la que me expreso y trato a los demás. Por supuesto también poner límites sanos, con amor, amabilidad y de forma contundente a las personas que me rodean y a mí misma cuando inconscientemente busco lastimarme o castigarme.

 

 

 

¿Qué hago ahora que me di cuenta?

Yo tuve mucha suerte, porque nunca llegamos a los golpes y él decidió dejarme, yo estaba súper aferrada a que era el amor de mi vida y estaba dispuesta a hacer hasta lo imposible para que funcionara, incluso hacerme chiquita y permitirlo todo, porque así me enseñaron. 

Pero hay muchas mujeres que no tienen la misma suerte que yo: según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), cada dos hora y media, es asesinada una mujer en México ( t.ly/1LsB) la mayoría en manos de sus parejas, esas parejas no se vuelven violentas de un día para otro; esas mujeres no pudieron salir de un amor tóxico, por falta de herramientas emocionales, económicas o sociales, por eso es muy importante buscar ayuda.

Si estás en una relación de amor tóxico y no puedes salir de ahí, espero que esto te sirva para encontrar tu propio camino de sanación, entender por qué estás tan enganchada, qué es lo que te hace sentir, a quién te recuerda y quién más te trata de esa manera y poderte liberar de tus propios conceptos de amor que no son correctos. Porque mereces ser amada, respetada, cuidada, valorada, escuchada.

 

amor tóxico

 

Busca ayuda profesional, ir a terapia me ha salvado la vida y me ha dado estas herramientas para sanar. 

A veces sólo “valorarte” no es suficiente, necesitas ir más profundo para encontrar por qué tus relaciones son de esa manera y con ayuda de un profesional es más fácil que lo logres.

Ahora que puedo entender de dónde viene mi concepto de amor, puedo hacer un cambio y siento que se abren mil posibilidades para mí. También entiendo que mis padres hicieron lo mejor que pudieron según sus creencias, ellos no tenían el acceso a la información que tenemos ahora, estoy segura que me dieron lo mejor de ellos y su intención jamás fue lastimarme, sino todo lo contrario, ellos pensaban que era lo mejor.

Me toca a mí, con las herramientas que tengo, sanar esas heridas para descubrir una forma distinta de amar, porque todos merecemos un amor bonito.

 

amor tóxico